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El próximo año se producirán cambios en los programas subsidiados de cuidado infantil para el condado de Eagle

Scott Miller
Las familias no se verán afectadas, pero sí los presupuestos estatales, a medida que se reduzca el financiamiento del estímulo federal de la era del COVID
Los archivos de Vail Daily

Los programas de cuidado infantil con apoyo federal y estatal del condado de Eagle no verán un impacto este año en la manera en que se financian estos programas.

La directora de servicios humanos del condado de Eagle, Megan Burch, dijo en una entrevista telefónica el pasado lunes que el programa se está volviendo más costoso para el condado en la forma en que se paga a los proveedores. El cambio más importante es que el pago a los proveedores ahora se realiza de la misma manera que las familias lo hacen a los proveedores. Por ejemplo, si un niño está inscrito para un mes de servicio, esa familia paga ese mes, independientemente de si ese niño asiste durante todo el mes o no. Así no es como solían pagar las familias que recibían asistencia del condado, cuando solo se pagaba por los días que un niño asistía realmente.

Los proveedores ahora tienen una mejor idea de cuánto recibirán por un niño inscrito para su cuidado, dijo Burch, sin que se le cobre más a una familia.



Pero ese costo adicional para el programa, le está costando más dinero al estado. Dado que la financiación del estímulo federal de la era COVID está terminando, el estado ahora está gastando de más y la financiación estatal se está agotando.

Burch dijo que los condados más grandes se encuentran en una situación apurada. El condado de Eagle no está en esa situación, ya que recibió aproximadamente $3.5 millones para servicios en 2025 para ayudar a 270 familias mediante 60 proveedores. Burch dijo que eso es un aumento con respecto a 2019, cuando la financiación federal era de $838,000.

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Burch dijo que su departamento llegó a más familias cuando el financiamiento del estímulo federal estuvo disponible.

Debido a esa ayuda, “Muchas familias pueden trabajar porque tienen un lugar seguro para dejar a sus hijos”, dijo Burch.

Si bien el programa se reducirá a medida que disminuya el financiamiento, Burch dijo que quienes participan en el programa hoy podrán seguir incluidos mientras permanezcan inscritos. En promedio, eso es alrededor de tres años.

Y las familias que quieran inscribirse aún pueden hacerlo este año. La inscripción está disponible para aquellos que ganan hasta el 270% del nivel federal de pobreza. Eso es aproximadamente $5,800 por mes para una familia de tres.

Las familias pueden inscribirse a través del sitio web del condado en la página del Departamento de Servicios Humanos o en persona en una de las oficinas del condado.

En un informe del 27 de enero, la comisionada Jeanne McQueeney preguntó si este podría ser momento para que el condado pudiera hacer su propio “auto rescate”, tal vez a través de su impuesto al hospedaje o un recurso similar.

“Me encantaría saber de qué tan grande cantidad estamos hablando”, dijo McQueeney.

En una conversación telefónica el pasado lunes, Burch dijo que, al menos en este año, el programa estará cerca de gastar la totalidad de su asignación de fondos estatales y federales, y que la financiación a futuro sigue siendo una incógnita.


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